“Cada Encuentro que vivimos nos transforma políticamente”

Las dirigentes nacionales, Marta Galante y Silvia León, que encabezaron la comitiva de ATE en el XXXII Encuentro Nacional de Mujeres realizado el pasado 14, 15 y 16 de octubre en Resistencia, provincia del Chaco, realizaron un balance de las jornadas y dieron su impresión sobre la elección de la sede. Además, se sumaron al repudio de la Comisión Organizadora del ENM, por los graves hechos de violencia machista que ocurrieron el lunes por la tarde.

 Marta Galante, responsable de la Dirección de Género de ATE Nacional, resaltó que fue un Encuentro “muy positivo”. “Pudimos confraternizar y debatir aún con diferentes opiniones, de todas las problemáticas de las mujeres, las que tenemos trabajo y las que no tenemos también”, reflexionó. “A diferencia de lo que vivimos otros años se pudo debatir con mucho respeto”. “Participé junto a otras compañeras en el taller de Mujeres y Sindicato. Allí pudimos expresar lo que nosotras como mujeres trabajadoras venimos haciendo dentro del sindicato y lo que proponemos, logrando consensos con las mujeres de todo el país que estaban allí presentes”.

Asimismo, Galante destacó el “maravilloso trabajo que hicieron las compañeras de nuestra organización dentro de la comisión organizadora. Pasamos días muy agradables por la dedicación que pusieron las compañeras y compañeros para asistirnos en lo que necesitábamos”. 

Nuestro cuerpo, nuestro territorio

Por su parte, la dirigente celebró que la sede del próximo Encuentro sea en Puerto Madryn, provincia de Chubut: “Que sea Chubut  nos va a hermanar mucho más, porque vamos a tener que redoblar los esfuerzos para que puedan participar mas compañeras en el XXXIII Encuentro”.

Al respecto también se expresó Silvia León: “Estoy muy contenta con la definición del próximo Encuentro. Si bien para nosotras era tentadora la propuesta de La Plata, este año no había una decisión nacional de nuestra ATE con respecto a la próxima sede  y primó el llamado de la compañera de los pueblos originarios de que sea Chubut”. Y agregó: “La mayoría de las compañeras de nuestra organización presentes en el acto de cierre sentimos que en este momento político primaba el llamado de la defensa de la tierra y de los pueblos originarios, así como la necesidad de manifestarnos frente a la gravedad política que tiene la desaparición de Santiago Maldonado por parte de la Gendarmería”.

“Se sintetiza en la fundamentación de la elección de Chubut como sede, nuestra consigna feminista de que nuestros cuerpos son nuestros territorios, y que nuestros territorios son nuestros cuerpos, en esta unidad indivisible de lo que es la defensa de nuestros cuerpos, la defensa de nuestras vidas, de nuestra tierra y nuestros  bienes comunes”, dijo León y reafirmó: “Primó la consciencia política de defender a los recursos naturales frente al avance de todos los gobiernos, del actual y anterior, del extractivismo de nuestros bienes, del avasallamiento de los pueblos originarios, la extranjerización y militarización de nuestros territorios”.

Aprendizajes

“Sentimos que cada Encuentro que las mujeres vivimos en nuestros cuerpos y vidas nos transforma. Cada una vuelve fortalecida y más consciente de la importancia que tiene el Encuentro con miles de mujeres, como cambio político en nuestras vidas”, dijo Silvia León en el largo viaje de regreso, que fue, como cada momento de las jornadas, otra oportunidad para seguir confraternizando y debatiendo políticamente. En este Encuentro, remarcó: “Las mujeres de la CTAA,  a pesar de debates difíciles y profundos, hemos sabio priorizar lo esencial por sobre lo secundario, construir nuestra unidad en la calle que es lo que la central necesita: fortalecernos construyendo consensos y unidades”.

Asimismo, manifestó algunas salvedades, sobre todo respecto a la forma de avanzar en consensos de propuestas de las sedes  y al recorrido de la marcha. “Sería importante realizar debates más profundos previos al Encuentro, para poder analizar políticamente cuál debería ser las sedes cada año y llevar  propuestas mas consensuadas para el debate y que no haya, como paso el año pasado, imposición de algunas organizaciones por sobre la mayoría”.

Por otro lado, indicó, “hay que seguir profundizando que estos Encuentros tengan contenido político, que se interpele a todos los poderes: la Iglesia, al poder político, judicial y policial. Tienen que ser una herramienta de interpelación, para seguir avanzando en la defensa de los derechos de las mujeres”.

Cabe recordar que desde ATE se expresó la adhesión y el apoyo al repudio de la Comisión Organizadora del XXXII Encuentro, del que son parte compañeras del CDP de Chaco, a los graves hechos de violencia machista que sufrieron un grupo de mujeres participantes de las jornadas, luego del cierre y cuando ya la gran mayoría de los contingentes habían partido. Aprovechando esa situación, un grupo fundamentalista atacó con palos, piedras y cuchillos a mujeres mientras iban a comprar comida o esperaban, en la plaza 25 de mayo, emprender su retorno.

Sin embargo, este hecho ni otros ataques aislados que sucedieron durante la marcha, pudo empañar el espíritu fraterno del Encuentro. “La ciudad de Resistencia fue muy cordial con las mujeres del Encuentro”, destacó Marta Galante “lo que  nos  fortalece  para seguir avanzando en los cambios culturales para derrotar el patriarcado convencidas de seguir marchando hasta que todas seamos libres”, enfatizó la dirigente.

Prensa ATE