25 de marzo de 2020
La estrategia debería ser fortalecer la Salud Pública
El sistema público de salud provincial cuenta con 1.616 camas de las cuales 90 son de Cuidados Intensivos (32 en el área de pediatría y neonatología).
El Secretario General del
Consejo Directivo Provincial de ATE Misiones y también de la CTA Autónoma de
Misiones Jorge Duarte, quién también es enfermero en el sistema de Salud
Pública, analizó la situación del sistema sanitario de la provincia y las
políticas que deberían implementarse en el marco de la amenaza de la expansión
de la pandemia de Coronavirus en nuestra zona.
Esta amenaza emergente
para la salud pública, la pandemia del Síndrome Respiratorio Agudo Severo
Coronavirus 2 (SARS-CoV-2) y lo que causa, la enfermedad por Coronavirus 2019
(COVID-19), puso en jaque a los sistemas sanitarios del mundo, y pone a prueba
su capacidad de respuesta, revelando
diferentes resultados que radican en sus Sistemas Sanitarios con sus
componentes que lo sustentan: sus estructuras físicas (número de hospitales,
número de camas por habitantes, elementos e insumos de trabajo), sus políticas
sanitarias (el Estado como rector del lineamiento Político-Sanitario), sus
Recursos Humanos (equipo de salud multidisciplinario, en cantidad y
capacitación).
Como ejemplo inicial
Duarte destacó los sistemas sanitarios de Japón o Corea del Sur, que manejaron
esta pandemia poniendo todas sus herramientas al servicio de la Salud de la
población con un impacto marcadamente menor, a diferencia de otros países en
cuyos sistemas sanitarios subyacen factores que jugaron en contra en esta
crisis, como las decisiones adoptadas o el número de camas disponibles para
atender las demandas como ha sido el caso de Irán, España, Italia y China. Los
primeros, países con sistemas fortalecidos, cuentan con un índice de camas cada
1.000 habitantes que va de 11,5 a 13,4 mientras los segundo 0,2; 3; 3,4 y 4,2
camas cada 1.000 habitantes respectivamente.
“Los países con
resultados óptimos tuvieron otra acción decisiva, efectuaban las pruebas en
forma masiva. Corea del Sur tenía una red de 96 laboratorios que procesaban los
hisopados nasales y orofaríngeos para diagnosticar el virus, identificaron no
sólo a casos sospechosos, sino que lograron identificar a los infectados a
quienes pusieron en cuarentena y monitorearon su evolución, permitiendo
retrasar la diseminación y brindar mejor atención a los enfermos”, señaló.
El
sistema sanitario misionero: carencias y fortalezas
Las autoridades
provinciales sostienen que Misiones tiene “un sistema sanitario preparado”,
mirada que queda por tierra cuando recorremos los hospitales de distintos
niveles de complejidad con innumerables carencias estructurales, de recursos
humanos y de elementos básicos para el desarrollo cotidiano de las funciones
sanitarias. A pesar de ello es vital resaltar una característica sustancial del
sistema en Misiones: sus trabajadores.
“Ese equipo de salud
(choferes, administrativos, mucamas, enfermeras, médicos, bioquímicos,
técnicos, psicólogos, promotores, trabajadores sociales, etc., etc.) como principal componente dispuesto a
afrontar estos desafíos en marcada desventaja, pero con el compromiso social
potenciado, retribuido por la comunidad con gestos invalorables como la
confección de camisolines, barbijos y batas para la protección de los
trabajadores sanitarios”, señaló Duarte, quién agregó que “para esto la
provisión de materiales de protección personal en cantidad y calidad apropiada
es sustancial para mantener la bioseguridad de cada uno de los integrantes del
Equipo de Salud, se debe priorizar la protección del personal de todos los
hospitales y CAPS socializando los protocolos, disponiendo de estas
herramientas e instrumentando estas medidas de forma masiva en todos los
lugares inclusive en las ambulancias y
unidades de traslado”.
En cuanto a la realidad
en números del sistema Duarte señaló que “nuestro sistema público de salud
cuenta con 1.616 camas de las cuales 90 son de Cuidados Intensivos entre estas
32 en el área de pediatría y neonatología. Ubicando el índice de número de
camas por 1.000 habitantes en 3.0, siendo esta una estructura endeble para una
alta demanda. La adquisición reciente de tecnología (respiradores) es sumamente
necesaria (los respiradores de las UTI están en su límite de utilización) para
dar una mejor respuesta a la eminente propagación del COVID 19. Esta
aparatología médica requiere intensificar el número de trabajadores para esta
área. La tecnología y el personal son decisivos y van de la mano con un
conjunto de elementos como suministro de oxígeno y aspiración central, aire comprimido,
humidificadores”.
En referencia a la
cantidad de trabajadores de la salud, afirmó que “los números no son los más
alentadores. Según el Observatorio Federal de Recursos Humanos en Salud del
Ministerio de Salud de la Nación, a provincia de Misiones se ubica con los
índices más bajos del país de enfermeros y médicos (2,4 y 1,8 por 1.000
habitantes respectivamente). Con el agravante de que los trabajadores - una de
las principales fortalezas del sistema sanitario en Misiones - se encuentran
frecuentemente bajo alguna forma de precarización o fraude laboral, situación
que en el ámbito público alcanza al 50% de la planta y además con unos de los
salarios más bajos de América Latina, algunos por debajo de la línea de
indigencia como los Promotores de Salud”.
“Siempre estamos a tiempo
y este es el momento de corregir y fortalecer al Hospital Público y la Salud
Pública, como lo supiera algún sanitarista que hizo frente a epidemias,
erradicándolas, pero también otorgando - hoy también lo exigimos - salarios dignos y condiciones dignas de
trabajo, estabilidad laboral, desprecarización laboral. Fue una decisión
política que deja aún el resabio de ese Estado de Bienestar, golpeado por los
gobiernos, pero que aún sigue siendo un modelo para éste y otros desafíos”,
remarcó al final, en referencia directa a la realidad del personal de Salud de
su provincia.
ATE Misiones