6 de julio de 2020
Comunicado de ATE Mendoza: Contra el hambre y la represión
ATE y la CTA Autónoma de Mendoza, emitieron un comunicado en representación de los Municipales de la Ciudad, contra de la represión y el hambre.
Después de
las instancias administrativas realizadas a la Municipalidad de Mendoza y al
intendente Ulpiano Suarez, sobrino del gobernador de Mendoza, Rodolfo Suarez,
nuestro sindicato viene requiriendo la necesidad de entablar una discusión
colectiva de las condiciones laborales de los trabajadores.
Una vez
agotadas las instancias administrativas de los reclamos, por decisión
mayoritaria de nuestros representados, se comunicó la retención del débito
laboral, frente al reiterado silencio e indiferencia de las autoridades.
La acción de
la retención del débito laboral comunicada se planteó efectivamente en el lugar
de trabajo de cada uno de los empleados Municipales y por decisión voluntaria
de los mismos.
Establecimos
un riguroso protocolo para las acciones comunicadas, basadas en las
recomendaciones del Ministerio de Salud de la Nación, que se notificó al
Ministerio de Trabajo de la Nación, al Ministerio de Salud de la provincia de
Mendoza, a la Subsecretaría de Trabajo y al municipio de la Ciudad de Mendoza.
La retención
del débito laboral se materializó con la permanencia de los trabajadores del
turno en el lugar de trabajo, sin la obstaculización de entrada y salida de los
camiones municipales.
Estas
medidas se vieron perturbadas el día sábado 13 de junio del corriente año por
el accionar desmedido y represivo de la Policía, que mediante el ejercicio de
la fuerza desalojó a los trabajadores de su propio lugar de trabajo (predio ex
UCIM). En el mismo funciona el obrador municipal y guarda de material rodante
de los sectores de Higiene Urbana, Barrido, Arbolado, Recolección y Vivero.
Todo esto, teniendo en cuenta que una fiscal ya había constatado la
inexistencia de delito alguno, con especial atención en la libre circulación
del ingreso y egreso, tanto de personas como de vehículos.
Esa
represión policial no sólo vulneró el libre reclamo de los trabajadores, sino
que también dejó a compañeras afectadas por los gases lacrimógenos, golpes y
quemaduras, constituyéndose como un acto de violencia de género y agresión
hacia las mujeres sindicales y trabajadoras. Ante estas situaciones
mencionadas, se realizó la presentación correspondiente ante la Comisión de
Derechos y Garantías de la Cámara de Diputados de la Provincia de Mendoza y
organizaciones de Derechos Humanos.
El municipio
de la Ciudad de Mendoza arbitrariamente resolvió el cierre y prohibición de
ingreso al predio de la ex UCIM a los trabajadores del lugar, imposibilitando
la realización del marcado de asistencia, vulnerando derechos esenciales
provistos por la CN, CP, Ley 23.551 Dec. Reglamentario 467/88, acuerdos
paritarios vigentes y normas de la OIT. Tal situación se denunció ante el
Ministerio de Trabajo de la Nación: “lock out” incoado por la Municipalidad de
la Ciudad de Mendoza, mediante resolución (interna) 157/20 de la Secretaría de
Desarrollo Urbano de la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza. Esta huelga
patronal es una medida ilegítima que tiene por objeto impedir que los
trabajadores puedan ingresar en el establecimiento, no certificar su presencia
en el lugar de trabajo.
A partir de
la represión, los trabajadores en asamblea decidieron continuar ejerciendo la
retención del débito laboral en instalaciones del ex Ferrocarril Gral. San
Martín, predio federal, en donde funcionan oficinas de Preventores del
municipio.
El día 23 de
junio fueron recibidos los dirigentes de ATE por la Secretaría de Gestión
Pública de la Municipalidad de Mendoza, Lic. Érica Rojas, a partir de la cual
se comenzaron a trabajar y se presentaron distintas propuestas de recomposición
salarial, mientras los trabajadores permanecían, según el protocolo de
distanciamiento social, reunidos en sus lugares de trabajo a la espera de
respuestas por parte del municipio. No obstante, engañados por el municipio de
Mendoza, fueron cercados por fuerzas de combate de la Policía con intención de
amedrentar.
En tal
circunstancia es que la madrugada del día sábado 27 de junio a las 3 de la
mañana se hicieron presentes grupos de combate de la Policía de Mendoza en el
predio donde funciona la División de Tránsito, los cuales sin mediación de
ninguna instancia judicial, pero con palo en mano, desalojaron a los
trabajadores para que depongan la medida gremial que llevaban adelante. Así,
los trabajadores debieron salir a buscar refugio en el predio (federal) del
ex-Ferrocarril San Martín. A las 10:30 horas de ese mismo día, los trabajadores
fueron cazados por la Policía donde fueron imputados 58 trabajadores, de los
cuales 2 quedaron detenidos.
Sin
arrodillarse frente a la represión sufrida, los compañeros se movilizaron en
varias oportunidades al edificio municipal para buscar una respuesta, pero al
no tener respuestas del municipio los trabajadores, por su propia voluntad, se
encadenaron en el Kilómetro 0 de nuestra ciudad.
Hasta que
durante el mediodía del domingo 5 de julio, las fuerzas de combate de la
Policía volvieron a reprimir los justos, pacíficos y dignos reclamos de los
Municipales de Capital, con más forcejeos, palos, sangre y detenciones de
trabajadores y representantes gremiales por igual.
Esta es la
Mendoza que no se quiere mostrar en los medios, la Mendoza del hambre y la
represión.
Es de
destacar las decenas de adhesiones de organizaciones políticas, sociales,
sindicales, religiosas de todo el país y de personas individuales, que se
solidarizaron con los trabajadores Municipales en su legítimo reclamo que
llevan adelante.
Los
trabajadores necesitan poder alcanzar el valor de la canasta básica para poder
comer, tanto ellos como sus familias. El salario de muchos de ellos se
encuentra por debajo de la línea de indigencia, con una carga horaria de 40
horas semanales. Lo que conlleva a que sus familias pasen hambre, no tengan una
vida digna como trabajadores, encontrándose junto a sus familias viviendo en
estado de abandono y pobreza por los paupérrimos salarios.
No somos
ajenos al contexto que nos toca vivir, pero la pandemia no puede ser la excusa
para cerrar la puerta al diálogo y a la discusión de alternativas que permitan
sacar de la crítica situación social a estos trabajadores de la Municipalidad
de Mendoza.
Prensa ATE Mendoza